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TOMB RAIDER 8: DESCUBRIENDO AVALÓN


Tomás

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solo vot a decir que me encanto el relato: fue un poco confuso entender como describias los cuartos, pero no importa,usando la imaginacion pude entenderlo

 

ahora a completar los deberes:

 

que mueran:

 

La mucama:puesto que ya la an culpado de homicidio supongo que sera condenada a cadena perpetua condenada a muerte

 

James rutland:ese es un villano que de verdad merece morir

 

Maggie:supongo que Vivian querra venanza por lo de su padre y se vengara con ella.

 

los que no moriran:

 

Lara:la protagonista no debe morir

 

Amanda:Amanda era una buena amiga de Lara,no se si lara es capaz de matarla

 

William:no debemos desperdiciar a tan buen personaje,aunque sea otro villano del relato

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Sinceramente, Luciano, ¿William te parece un villano :P ?

 

ENTREGA 21

 

 

- ¿Y ahora qué harás? –se asustó Alister

- Pues, acabar con ella –repuso Lara.

La descomunal estatua estrelló su espada contra el suelo, justo donde la chica estaba parada, pero afortunadamente logró esquivar su ataque girando hacia atrás.

Un temblor sacudió el suelo con el ataque del caballero plateado, y Lady Croft llegó a la conclusión de que no estaba tratando con una estatua cualquiera. Tenía la ventaja de que ésta era muy lenta, pero cada vez que intentaba estrellarle la espada en la cabeza se convenció de que lo que tenía de lenta lo tenía de difícil.

Disparó a quemarropa, sin dejar de dar saltos laterales, mientras intentaba no caer al tremendo foso de cocodrilos que había a un costado; las balas parecían no hacer efecto en la estatua, siendo ésta de metal, pero, aunque no se notara a simple vista, el caballero cada vez lucía más debilitado.

El antiguo servidor de Ramsinit decidió cambiar de táctica; comenzó a lanzar rayos mortecinos de su espada, que hubieran freído a Lara de no ser por su asombrosa velocidad. Y cuando uno de los rayos le dio a uno de los cocodrilos del foso, haciéndolo cenizas al instante, Lady Croft empezó a preocuparse sinceramente.

Al ver a la joven respirar agitadamente por el cansancio de girar y disparar, el caballero se detuvo para descansar, jadeando lentamente, y sin poder creer que su presa fuera tan persistente.

Era su oportunidad:

¡BANG, BANG, BANG!

Tres tiros sirvieron para hacer estallar al gigantesco caballero metálico en mil pedazos, pagando así muy caros los diez segundos de descanso que se tomó.

- Se nota que el caballero era hombre –comentó vanidosa Lara.

- Oye, los hombres somos mucho mejores –repuso Alister ofendido-, mientras nosotros trabajamos, ustedes simplemente cocinan y crían a los niños.

- Es más, oye este chiste –dijo Zip-:¿cuándo la Mujer va a pisar la Luna?

- No sé, ¿Cuándo? –preguntó Alister.

- ¡Cuando haya que limpiarla!

- ¡JA JA JA JAJA JAJA! –Zip y Alister estallaron en carcajadas, mientras Lara fruncía los labios.

- ¡Y yo tengo otro! –saltó Alister tímidamente-¿qué es para la Mujer salir de la cocina?

- No sé, ¿Qué es?

- Un nuevo mundo.

- ¡JA JA JA JA! ¡JEJEJEJE JE JE, JO JO JO JO JO JAJA JO JA! –Zip y Alister estaban matándose de risa, y Lady Croft ya no podía contener su furia.

- ¡CÁLLENSE LA BOCA, PAPANATAS! –Hacker e informático se asustaron terriblemente y gimieron-¡YO, QUE SOY MUJER, ESTOY AQUÍ ARRIESGANDO MI PELLEJO, MIENTRAS USTEDES, PAR DE INÚTILES, QUE DICEN SER HOMBRES (SOBRE TODO TÚ, ALISTER), ESTÁN EN MI CASA TRANQUILOS Y COMIENDO!

- Bueno, bueno, Lara, sólo bromeábamos –Alister intentó apaciguarla.

- Yo también, imbéciles –La arqueóloga echó a reír, haciéndolos quedar como completos idiotas-¡Miren eso! –exclamó de repente, al ver que entre los restos de la estatua estaba la tercera pieza que faltaba del mosaico.

Tras regresar, Lara colocó las tres piezas en su lugar, completando así el mosaico del Faraón Ramsinit y sus tesoros, y abriendo la puerta.

Descendió por las sinuosas escaleras que halló a continuación, encontrando finalmente a su amiga la chamán.

- ¡Oh, Putai! –exclamó aliviada, abrazándola-¡Gracias a Dios no te ha pasado nada!

- Y mira –señaló ella hacia delante. Un túnel conducía a la salida del palacio, y desde allí se percibía un imponente mausoleo gris cuya puerta estaba abierta.

- ¡Por fin! ¡La Cámara de Ramsinit! Allí guarda sus incontables riquezas.

- Sí, claro –corroboró Putai-, pero según la leyenda, el lugar está lleno de todo tipo de trampas.

- Lo sé. Los hijos del arquitecto de Ramsinit murieron intentando superarlas, pero a nosotras no nos ocurrirá lo mismo.

Putai se acercó a observar las inscripciones jeroglíficas que había en el mausoleo.

- Aquí dice que aquel que ose entrar y apoderarse de los tesoros del Faraón sufrirán su ira. Tal vez no lo sepas, pero se dice que el dios Amón condenó a su alma a permanecer por siempre en la Cámara.

- Lo sabía, amiga mía, y no le temo –terció la valiente Lara-. No perdamos más tiempo.

 

D)La Cámara de Ramsinit

 

 

La arqueóloga y la beduina, tomadas de la mano, se deslizaron por la rampa que había a continuación, llegando hasta una cornisa junto a una dura pared, en un salón diminuto, sin nada más que eso y un interruptor en la pared.

- Parece que es el único camino –objetó Lady Croft.

Pulsó el interruptor, y de inmediato, el suelo se resquebrajó bajo sus pies.

Se deslizaban por una nueva rampa, que terminaba en el vacío. Bajo él se distinguía una franja de pinchos con un esqueleto ensartado. Lara, que no deseaba hacerle compañía, tomó a Putai por el brazo, y la lanzó con todas sus fuerzas hacia el saliente que había tras la rampa. Luego, ella misma saltó, se aferró a la cornisa, y ayudada por la chamán, logró subir.

- Gracias, Lara –jadeó Putai poniéndose de pie-¿sabes? Creo que estoy siendo una carga para ti desde que perdí el bastón. Siempre tienes que protegerme.

- No te preocupes. Presiento que muy pronto tendrás oportunidad de hacer algo por mí –Lara no sabía por qué, pero sentía esa corazonada.

Las dos amigas (Lara adelante, por supuesto), avanzaron sigilosamente, llegando a una sala cuadrada cuya puerta de salida estaba cerrada.

Pequeñas culebras invadieron el lugar, pero, afortunadamente para ambas, decidieron atacar a Lara, quién con tan sólo cinco disparos acabó con todas.

Al hacerlo se abrió la puerta contigua.

Se hallaban ante una habitación en la que tenían que escalar; Lara y Putai treparon por el primer saliente, saltaron hasta el segundo, y tras subir hasta el tercero, vieron un esqueleto magullado, y junto a él, un par de pistolas.

- Toma, Putai –Lara tendió las armas recién halladas ante su amiga-, úsalas para defenderte.

- Imposible, Lara –se rehusó la beduina-, soy chamán de una tribu, jamás empuñaré un arma de fuego, jamás. Prefiero morir antes que hacerlo.

- Pues yo prefiero que lo hagas antes de que mueras –terció Lara, suplicante-, he perdido a mi madre, a mi padre, a Werner y a unos cuántos amigos: no se repetirá jamás.

Putai titubeó, pero segundos más tarde, tomó las armas y siguió a su amiga, que le echó una mirada de reproche.

Llegaron a una sala inmensa en lo alto de toda la cámara; evidentemente lo que tenían que hacer ahora era bajar lentamente.

Dos molestos murciélagos se acercaron a perturbarlas, pero ellas los liquidaron de un disparo cada una. De frente había una puerta abierta de bronce, y a la izquierda de la entrada, unas escaleras.

- Escucha, Lara: yo entraré por la puerta, y tú desciende por las escaleras.

- Muy bien –aceptó ella, y se separaron.

Al terminar de bajar las escaleras, Lara saltó y se aferró a la cornisa que encontró de frente, con un interruptor a la izquierda y una puerta cerrada a la derecha.

Activado el interruptor se abrió la puerta, pero tan pronto Lady Croft puso un pie adentro, el suelo comenzó a venirse abajo.

- ¡Lara, sal de ahí! –gritó Alister.

La exploradora se trepó a un saliente cercano, que enseguida comenzó a derrumbarse; pero antes de eso, ella logró alcanzar la liana que había en lo alto y se aferró a ella mientras veía como todo el suelo caía.

A continuación se balanceó hacia delante hasta saltar sobre suelo firme, y descendió escaleras abajo.

El lugar comenzó a inundarse de arena, por lo que tuvo que acelerar la marcha; para colmo, filosas cuchillas comenzaron a caer desde lo alto del techo.

Una de ellas le rozó la coronilla, otra casi la hubiera atravesado de no ser porque giró justo a tiempo, y otras cinco la habrían ensartado si no hubiera corrido en zigzag para esquivarlas.

Pasado el peligro, Lara, toda sucia de arena, se dio cuenta del gran peligro que corría: Ramsinit sabía que había una intrusa en su Cámara, y no descansaría hasta hacerla papilla.

Gracias a que tenía poca fuerza, caminó muy lentamente, y prestando tan poca atención que cayó a un pozo. Ahora no sólo Lara, sino también Zip y Alister, gritaban aterrados.

Finalmente, ella se estrelló dándose un golpe en la cabeza que la dejó inconsciente. Mientras tanto, ecos del pasado retornaban a su mente…

 

 

- Realmente tienes una hija muy bien educada, querida –felicitaba Lady Angeline a la cuñada de su esposo.

- Gracias, Angeline –sonrió Lady Croft complacida-; apenas tiene cinco años, pero para su edad es una niña muy inteligente.

- Se nota –corroboró Lord Errol-, el profesor Kane me ha dicho que es una alumna ejemplar.

- Y cuando crezca, será tan hermosa como tú, mi amor –dijo cariñosamente Lord Croft a su mujer.

- Mucho más que yo –respondió ella, besándolo.

Lord Richard Croft y Lady Amelia Croft habían invitado a cenar al hermano de éste y su mujer, que quedaron admirados de los modales de la pequeña Lara.

- Será toda una dama inglesa –apuntó Lady Angeline.

- De hecho, un amigo nuestro, Lord Farrington, tiene un niño de su edad, estoy seguro de que si se conocen serán muy buenos amigos, y quizá, con los años, algo más que eso –añadió Lord Errol.

Entonces el mayordomo, un hombre joven, fornido y de pelo castaño, llegó corriendo y algo preocupado.

- ¿Qué ocurre, Winston?

- Lady Croft, venga pronto: su hija está llorando, no quiere hablar con nadie más que con usted.

El corazón de madre de Amelia intuyó que no ocurría nada bueno. El nerviosismo también se reflejaba en el rostro de su marido y de los dos invitados.

- Discúlpenme, ya regreso –dijo humildemente, poniéndose de pie.

La pequeña Lara lloraba estruendosamente desde la cama, en su habitación toda decorada de rosa y repleta de juguetes hermosos y de alta calidad.

- ¡Mami! ¡Mami! –la niña extendió los brazos al verla llegar.

- ¡Lara, mi vida! –Amelia abrazó a su hija al instante. La mujer lucía muy hermosa, con su largo cabello negro suelto y el vestido de noche de color azul. Tenía sólo treinta años y era una gran figura de la aristocracia británica, pero más allá de todo, una gran esposa y una excelente madre -¿Qué te ocurre?

- Tuve una pesadilla –repuso la criatura enjugándose las lágrimas.

- Bueno, bueno, ya pasó –la consoló, abrazándola nuevamente y dándole besitos en la cabeza-¿Quieres que te lea un cuento?

- ¡No, un cuento no!

- ¿Por qué no? –se extrañó Amelia-Tú adoras los cuentos de hadas.

- Ya no –repuso Lara-¿has visto que allí nadie tiene mamá? Cenicienta no tiene mamá, Blanca Nieves no tiene mamá, Bambi no tiene mamá, la Sirenita no tiene mamá, ¿por qué?

- No lo sé, hija –dijo Lady Croft con franqueza-.Debe ser por lo horrible que es quedarse sin mamá de pequeño. La madre es un ángel de la guarda para cada niño.

- ¡Eso fue lo que soñé, mamita! –La pequeña rompió a llorar y abrazó a su madre-¡Soñé que tú te morías y me dejabas sola!

Un horrible presentimiento recorrió la mente de Amelia. Rápidamente lo disipó, después de todo, ella de pequeña también había tenido pesadillas de ese tipo.

- ¡No, princesita, no! –la consolaba mimándola, mientras ella lloraba sin cesar-Aquí está mamita, vivita y coleando, para hacerte muchos mimos, leerte muchos cuentos y hacerte muchos muchos muchos mimitos.

- Yo te quiero mucho, mami, mucho –repuso Lara mirándola fijamente mientras su madre le secaba las lágrimas con sus dedos.

- Tu madre siempre te acompañará, Larita.

- ¿Lo prometes? –inquirió ya más tranquila.

- Lo prometo –afirmó Amelia sonriente mientras besaba su carita una y otra vez. Por suerte Lara se sentía mejor, y ahora reía feliz, en los brazos de su mamá.

 

 

 

Lara comenzó a reaccionar muy lentamente, aturdida por el dolor de cabeza causado por la caída. Cuando se incorporó, se vio ante un hombre joven, moreno, apuesto, vestido como Faraón egipcio, que la miraba con repugnancia.

- Con que hasta aquí has llegado, ¿eh, mortal? Me presento, soy el Faraón Ramsinit, dueño de estas riquezas, estoy condenado a permanecer aquí por toda la eternidad, y veo que tú querías robarte lo que con tanto esfuerzo he conquistado.

- ¿Para qué lo quieres, si tú estás muerto? –repuso ella.

Por la expresión colérica de Ramsinit se dio cuenta de inmediato de que no debió haber dicho eso. Echó una mirada a su alrededor y se vio en una sala completamente dorada, con una puerta cerrada y repleta de ataúdes.

- ¡Insignificante mortal! ¡Ahora me conocerás enojado!

Ante su orden, todos los ataúdes se abrieron, y de ellos salieron momias enfurecidas.

- ¡Ataquen! –ordenó Ramsinit.

El Faraón se elevó en el aire para observar la escena: de cada esquina, momias rodeaban a Lara, quién desenfundó sus pistolas, decidida a no darse por vencida.

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quiere matar a lara,¿eso no lo hace un villano? (hablo de William)

 

nose porque pusiste D) camara del faraon Ramsinit, es una duda nomas.

 

me gusta mucho la ccion que hay aqui, y creo que tengo una duda.

 

hubiera preferido que lara,despues de tener ese sueño,llorara,asi pareceria mas humana.

 

y otra duda,si Putai nunca uso armas de fuego como es que supo disparar a un murcielago justo en el medio?

 

lo demas muy bien,solo te pedira que expliques mejor los escenarios,hay algunas cosas que no entiendo muy bien y tengo que inventar la habitacion de mi cabeza.

 

por ejempolo: lara salto a una saliente y acciono una palanca y despues escalo una saliente y trepo una diana que aparecio de la nada?,jeje,solo que describas con mas exactitud los cuertos, sin presiones.

 

donde esta Amanda?esa es la gran duda que me deja este relato, por cierto deberias describir mejor al faraon Ramsinit ,como era,si era viejo,alto,delgado,joven ,etc.

 

muy bonito todo,sigue con el relato! :P

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Bueno, ser enemigo de la protagonista no es ser villano. Fijate como trata a su familia y a Vivian. Además dijiste que en su lugar harías lo mismo, y es una actitud lógica.

 

Es enemigo de Lara, cierto, pero distinto a los acostumbrados, que no tienen sentimientos.

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Aclararé todo:

 

1-Puse D) por que iríamos por el cuarto nivel de Egipto. Ya pasamos por A) Aldeas del Bajo Egipto, B)Flashback, C)Cruzando el Nilo, y luego seguirá E)Ramsinit

 

2-Al tener ese recuerdo de cuando era una niña de 5 años, Lara estaba desmayada por un golpe, al despertarse se veía muy confusa, tardó en comprender dónde estaba y esas cosas, y tampoco recordaba muy bien su recuerdo dormida. Si se hubiera quedado pensativa, ahí sí podría haber llorado, pero se desmayó, no es lo mismo.

 

3-Lo de Putai no lo aclaro, el trascurso de la historia se va a encargar de hacerlo por mi.

 

4-Creo que tenés razón con lo de los escenarios, aunque tampoco fue muy fácil armarlos en mi cabeza.

 

5-A Ramsinit si se lo describe, te lo repito: "Cuando se incorporó, se vio ante un hombre joven, moreno, apuesto, vestido como Faraón egipcio, que la miraba con repugnancia."

 

6-Un consejo para todos: DEJEN EN PAZ A AMANDA, PORQUE NO APARECERÁ POR UN TIEMPO MUUUY LARGO. ¿Por qué en tal caso no se preguntan por la gente de la Mansión Croft, o por Gunderson o por cualquiera? (se los digo con cariño) Sólo puedo decir que a Amanda le está saliendo todo perfectamente bien. Y aprovechen que no está, porque el día que esté no querrán verla ni en pintura.

 

7-Repito lo que dije hace un tiempo: No todo es lo que parece.

 

Otra cosita, ¿enserio te gustó el flashback? Quería que me quedara sensible.

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Muy buen relato,el flashback me encanto..!.Aunque en ciero modo es triste,ya que luego Amelia desaperece en Nepal,y deja a Lara sola,aunque no se sabe que le paso a Amelia,ni en tu relato,ni en los juegos.Pero en efecto es triste,y tienes razon,las madres son angeles de la guardia a los ojos de un niño...

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Uff, me he leido muchos apartados de un tirón para recordar y ahora no sé por dónde empezar... bueno, te hago un resumen para no agotar, ey?

 

1.- Excelente el recurso del flashback. Siempre lo he adorado, ¿qué haríamos los escritores sin él? Tengo que conocer al menda que lo inventó, seguro que fue un genio. Te quedan estupendos. Un consejo: ¿no te tienta la cursiva para el flashback? Suele ser muy útil...

 

2.- Ha sido muy buena esa forma de captar la psicología de la clase senatorial americana. Chicos, no despotriquéis de los Rutland, os juto que los Bush y los Clinton también son así... :yes:

 

3.- ¿Que más puedo decir? Te aconsejo que no abuses mucho de las mayúsculas ni las onomatopeyas. A mí me parecen poco estéticas y serias, aunque ninguna están de más y yo también las uso en raras ocasiones. Pero hacer frases muy largas con mayúsculas es algo que me espanta, de ahí que sea otra razón para detestar Harry Potter :jump:

 

En resumen, lo estás haciendo muy bien, sigue así. :abrazos:

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Esta muy bien el relato Tomas estas haciendo un Tomb Raider puro y duro : Trampas peligro y sobretodo mucha mucha accion :jump: te felicito

 

El flashback te quedo bien pero muy triste :abrazos: por que Amelia no cumplio con su trato por culpa de Amanda :yes: espero que reciba su merecido :fufu:

 

Y tengo unas cosas un poco confusas:

 

Como es que se sabe el plan de Amanda de que Lara vaya a conseguir los talismanes por ella para llegar a Avalon ?? entonces la carta del profesor Eddinton no era de el si no de Amanda ???

 

Quien es Clarisa ??? Esta contratada con Amanda o por Willian ?? Por que ella sola por su cuenta no trabajara digo yo...

 

Y lo de Putai Luciano tiene razon como es que nunca habia usado un arma de fuego y supo perfectamente disparar a un murcielago de lejos ???

 

Esa son mis dudas por que lo demas creo que ya lo tengo bien entendido...

 

Por lo que dice Luciano tiene razon si pudieras describir mejor los escenarios seria mejor por que creo que vas muy rapido y describes poco... ^_^

 

 

Espero la siguiente entrega con ansia y ver que paso con Putai y Lara con las momias jeje

 

Salu2

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Ana María: a mi también me gustan mucho los flashbacks; ya hemos visto a Lara de 5 años y a William de 16 años, tal vez veamos más cosas... :wub: y tendré en cuenta lo de la cursiva.

Tenés razón con eso de los Rutland, ese perfil era el que quería imprimirles. Pero no pensé que Maggie y James les atrajeran tanto.

Escribo en imprenta cuando los personajes gritan, y a mí me gusta mucho Harry Potter, (sobretodo la actriz que interpreta a Hermione Granger, tiene mi edad :P' ) pero cada uno tiene su gusto.

 

Escorpio: Lo de Putai NO fue un error, ya se verá más adelante... no creí que notaran ese detalle. Y gracias por el resto de los elogios. ;)

 

ENTREGA 22

 

E)Ramsinit

 

Una momia aprisionó a Lara por la espalda, pero se arrepintió enseguida al recibir un doloroso codazo en sus partes íntimas. Aprovechando momento de debilidad, la arqueóloga lo liquidó a disparos. Luego remató a las tres momias que se disponían a ahorcarla, y mientras saltaba hacia un lado y hacia otro, disparaba, disparaba y disparaba, sin poder creer que éstas fueran susceptibles a las balas.

Pocos minutos después, la sala dorada rebosaba de los cadáveres de las momias.

- ¡Nooo! –gritó Ramsinit, pálido de ira-Has llegado muy lejos, ilusa mortal, pero no podrás escapar de mí.

El Faraón saltó sobre ella, preparado para aplastarla, fallando por muy poco. De sus dedos produjo un rayo mortecino de destellos dorados, que dio contra una columna y la destruyó. A continuación lanzaba rayos a diestra y siniestra, mientras Lady Croft, sin saber qué hacer, corría en círculos para evitarlo. Su idea funcionó bien al principio, pero al cabo de un tiempo se sentía demasiado cansada como para seguir corriendo. Para colmo no podía matar a Ramsinit, porque él ya estaba muerto.

Pero por suerte, el Faraón también decidió cambiar de táctica.

- ¡Cederás ante mí, maldita! ¡Es tu destino! ¡Morir en mi cámara!

Descendió al suelo, desde donde comenzó a arrojar bolas de fuego. Lara giraba, saltaba, se escondía detrás de las columnas, pero cada vez estaba más cerca de morir ardida.

Con el tiempo, los ataques de Ramsinit lograron formar un incendio: el suelo comenzó a resquebrajarse y a venirse abajo. Lady Croft se aferró a un trozo de suelo que aún no había caído, sabiendo que si se soltaba se precipitaría en lava ardiendo, formada por centenares de bolas de fuego.

- ¿Qué esperas, Lara? –gritaba Alister-¡Súbete o caerás al vacío!

- No, puedo… hacerlo –temblaba-, ya no tengo fuerza.

Ramsinit, triunfante, se posó sobre el saliente en el cual Lara intentaba treparse.

- Ha llegado tu fin, mortal. Ocuparás tu lugar en el cementerio de los imbéciles que intentaron robar mi oro. ¡Despídete del mundo!

- ¡NO!

Estiró en alto el pie derecho, listo para pisotear las manos de Lara, pero, de repente, una fuerza invisible lo detuvo; el Faraón se postró de rodillas, suplicante, y mirando hacia arriba.

- ¡No, por favor, señor! ¡No me castigue! ¡No! ¡NO!

Un resplandor plateado inundó la habitación, impidiendo ver nada…

Y cuando se disipó, la habitación había vuelto a la normalidad, Ramsinit había desaparecido, y Lara estaba tumbada en el suelo ante su amiga Putai.

- ¿Qué pasó? –dijo muy nerviosa, incorporándose bruscamente.

- El peligro ha pasado –repuso serena-¿A que no adivinas? En la puerta por la que he entrado encontré un amuleto; con su ayuda invoqué al dios Amón, que fue el que se encargó de apaciguar a Ramsinit.

- En el fondo me da pena –manifestó con sarcasmo-.Ya pasaron más de mil años y sigue obsesionado con su tesoro.

Las dos rieron a carcajadas. De repente, la única puerta de aquella habitación dorada se abrió, y las dos entraron sigilosamente.

El asombro las dejó con la boca abierta: incontables cofres de oro, diamantes, rubíes, esmeraldas, pepitas doradas y valiosas reliquias antiguas inundaban toda la habitación.

- ¡Por el poder de Horus! –susurró Putai sin poder creerlo-¿Ramsinit conquistó todo esto?

- Ahora entiendo por qué los hijos del arquitecto querían robarle. Deprisa, recojamos los tesoros para Jean, y busquemos una salida. Aún no ha anochecido, pero estoy muy cansada, me quedaré a dormir en su casa en Alejandría y mañana seguiré trabajando. Por cierto, creo que tú deberías hacer lo mismo –aconsejó.

- Tienes razón –admitió Putai-, pero mañana al amanecer debo regresar a ver que ha ocurrido con mi tribu. No te imaginas qué terrible ha sido el ataque de ese tal Alex West y sus mercenarios.

- ¡Ése imbécil! –repuso enojada-No entiendo cómo no nos cruzamos con él, si también buscaba robarle a Ramsinit.

- No lo sé –se extrañó Putai.

A continuación se dispusieron a recoger todo lo que allí había.

 

 

 

 

 

 

 

 

Esa noche se produjo la misma lluvia torrencial que hubo durante el día; los rayos partían el cielo, apenas se soportaba el espantoso frío, y dos mujeres vestidas de negro se abrazaban, llorando sin cesar. Asistían al entierro de un hombre valiente, trabajador, cariñoso, pero poco prudente… ese hombre era George Hart.

Vivian sentía que no podía con tanto sufrimiento, le habían ocurrido demasiadas ese mismo día: fue humillada y despedida por su jefe, maltratada por la esposa de éste, y luego, perdió a su padre, asesinado a manos de la mucama de ambos. Bueno, al menos, Helga fue la asesina según la versión de la policía, pero Vivian, en el interior de su conciencia, sabía perfectamente cómo fueron las cosas: James Rutland fue el verdadero asesino de su padre, y no Helga; el mismo hombre que le había faltado el respeto y quitado el trabajo le quitó también a su padre, y esto había quedado impune, impune como el sinnúmero de crímenes cometidos por el senador a lo largo de su puerca y ambiciosa vida.

Annie, sin embargo, lucía peor que ella, llorando a gritos escandalosos mientras el entierro llegaba a su fin. Su hija hacía grandes esfuerzos para no llorar, tenía que ser fuerte para contener a su madre. George en todo momento había sido un padre y esposo protector, quién hacía sentir seguras a su esposa y su hija, y quién traía la mayoría de los escasos ingresos de su precario hogar. Desde luego, Annie y Vivian también trabajaban, ya que de otro modo no tendrían ni para el sustento, pero ambas sabían que se acercaba una época de crisis económica y emocional en la que debían mantenerse unidas, y Vivian sabía bien lo que tenía que hacer: conseguir un nuevo empleo y trabajar el doble de horas, para sostener a su deshecha madre. A pesar de ser opacada por su hija, Annie siempre fue una mujer bonita, pero la pérdida del amor de su hija hacía que se viera espantosa como una mendiga y con el rostro surcado de lágrimas.

Madre e hija giraron al ver aparecer a William en el funeral, con expresión profundamente triste, un ramo de flores en la mano, y un traje negro que, en opinión de Vivian, le quedaba estupendo.

Al verlo llegar, la rubia se separó al instante de su madre y se precipitó sobre los brazos del joven. Al hacerlo y ser a su vez abrazada por él, sintió que podía relajarse, abandonarse, y llorar tranquila. Repentinamente se olvidó de todo, olvidó su propio nombre, olvidó que su padre acababa de morir, y se perdió en los brazos del joven. La sensación de calor y protección que la invadía era única, no volvería a sentirla jamás con otra persona.

- Vivian, de verdad lo siento –dijo cariñosamente en cuánto se separaron, enjugando sus lágrimas y logrando arrancarle una leve sonrisa-Y usted debe ser la madre –añadió tendiendo la mano a Annie, que al verlo se apresuró a serenarse-, encantado de conocerla, soy William Rutland. Realmente lamento mucho lo de su esposo.

- Nadie lo lamenta más que yo –repuso la señora Hart sollozando-, he perdido a mi marido, y dentro de poco perderé la casa, quién cubría la mayoría de los gastos era él.

- Si me lo permite, yo puedo ofrecerle cierta ayuda, señora –dijo William tendiendo un billete de trescientas libras ante ella, dejándola muda de la sorpresa.

- ¡No, por favor, señor, no puedo aceptar eso!

- ¡Will, por favor no te molestes!

- Enserio, tómenlo, les vendrá bien –insistió el muchacho-, y si no lo hacen por ustedes, háganlo por George, él no querría verlas en la calle.

Annie, titubeó, pero finalmente, tomó el billete entre sus manos.

- Muchas gracias, señor Rutland, de verdad, muchas gracias –dijo con profunda gratitud.

- No es nada –repuso modestamente-, y créanme que lo lamento. Pero gracias al cielo, Helga está donde se lo merece: en la cárcel.

- ¿Qué dices? –saltó Vivian de repente-¡Pensé que estaba más que claro, Will! ¡La mucama no lo hizo, fue tu padre!

- ¿Cómo dices? –se asombró William.

- ¡Helga no tenía motivos para hacerlo, él sí! ¡Mi padre fue a defenderme y él le disparó!

- Oye, Vivian –balbuceó confuso-, sé que mi padre no es la mejor persona del mundo y que no ha sido nada caballero contigo, pero no es un asesino, no lo es.

- ¡Claro que sí!

- Hija, por favor –susurraba Annie, nerviosa.

- Will, escucha: sé que para ti es difícil asumirlo, después de todo es tu padre, pero no es más que un asesino, un puerco asesino –decía más calmada mientras acariciaba su rostro.

- ¡Mi padre no es un asesino! ¡Sería incapaz! ¡Y si tú crees eso, yo responderé por él! –saltó William, apartándose.

Vivian permaneció quieta unos instantes, sin dar crédito a lo que oía: después de todo lo que su padre le había demostrado ser durante toda su vida, William no creía que era un asesino, el asesino de su propio padre.

- ¡Muy bien! –decidió con los labios temblorosos-Si tú crees eso, me temo que ya no podremos ser amigos, William.

- Como quieras –y se marchó, dándoles la espalda. Le dolía tener que dejar a Vivian, pero no podía permitir que se acusara a su padre de algo tan descabellado.

- ¡Es un idiota, mamá, un idiota! –sollozó la joven abrazando a su madre-Si mantiene esa actitud tan estúpida, realmente se acabará nuestra amistad.

- Mi niña –repuso Annie acariciando su cabello-, yo te conozco, y sé que tú nunca has querido precisamente su amistad, ¿o me equivoco?

Vivian guardó silencio; su madre no se equivocaba en lo absoluto, ella no deseaba ser amiga de William, deseaba algo más que eso, y no le importaba si la familia de éste no la aceptaba. Desde niña sus padres le enseñaron que el amor era más importante que cualquier otra cosa, y así lo sentía ella, que en medio de tanto dolor, por fin había sentido el amor.

 

 

Mientras tanto, en la Mansión Rutland, Maggie parloteaba por teléfono sin cesar.

- Está decidido, Charlotte: no quiero a Eleanor en mi club de canasta.

- Desde luego, Maggie –repuso su amiga-, es una falsa, todo el mundo sabe que tiene un amante veinte años menor que ella.

- Oye, querida, ¿me esperas un segundo? –Maggie se dirigió a la mucama que su marido acababa de contratar-¡Jenny, tráeme inmediatamente un café sin azúcar! ¡Ahora! –ladró bruscamente.

- Sí, señora –temerosa, la mujer se dirigió a la cocina.

- Cómo decía, Charlotte, no quiero a Eleanor en el club de canasta. Por cierto, tú tampoco estás invitada.

- Pero, ¿por qué?

- Porque no se me antoja –en ese mismo momento, Jenny, que traía el café, tropezó y derramó la bebida hirviendo sobre la costosa blusa de Maggie.

- ¡Eres una estúpida, una idiota, una infeliz! –gritó escandalizada-¡Limpia eso inmediatamente!

- Perdón, señora –se disculpó apenada la nueva mucama.

- ¡Limpia y cierra la boca, sirvienta! –exclamó imperiosamente, y se dirigió a Charlotte-Y ahora, querida, deja de molestar. Tu marido es juez, no senador como el mío, así que no te mereces entrar en mi club. Buenas noches.

Colgó el tubo como quien se desprende de una araña venenosa.

Por los ruidos provenientes de abajo, Maggie supo que su marido había llegado; y, efectivamente, lo encontró tumbado en su cama, mirando el noticioso, en el que se anunciaba la muerte de George Hart a manos de Helga Harelip, la nueva secretaria del prestigioso político James Rutland.

James miraba la televisión con total tranquilidad y sin el menor cargo de conciencia. Su esposa se le acercó con paso decidido y le pegó tremendo cachetazo.

- ¿Te has vuelto loca? –inquirió rojo por el golpe.

- ¡Asesino! –susurró dolida-¿Cómo pudiste matar al padre de la pobre Vivian? Y encima de todo, ¡le echaste la culpa a Helga!

- ¡Cálmate, yo no lo hice!

- ¡No me engañes! Realmente no sé como pude casarme contigo, James Rutland. ¡Yo era tan joven, tan ingenua! ¡Y tú eras tan crápula como ahora, que eres un viejo miserable!

- ¿Yo soy viejo? Tengo sesenta años, y tú, amada esposa, tienes sesenta y cuatro.

- ¡Cierra la boca! Ya mismo iré a denunciarte a la policía.

- Toma, aquí tienes –dijo con desgano, depositando cien libras en su mano.

- ¡No me silenciarás con dinero!

- Toma, quinientas libras.

- ¡No pierdas el tiempo, te denunciaré!

- Setecientas libras –dijo con el mismo desgano, depositando un tercer billete en la mano de su esposa.

La expresión de Maggie cambió al instante.

- ¡Gracias, hermoso! ¡Sabía que nos entenderíamos! –exclamó radiante, besándolo sonoramente en la mejilla- Aquí tienes, para compensar ese golpe. ¡Pobrecito, no te lo merecías!

- Vete de aquí, parásito social –le espetó malhumorado. Desde luego, aquella había sido una extorsión sutil e indirecta de parte de su mujer, que siempre apelaba al mismo recurso para sus fines superficiales.

Justo entonces entró William, con aire melancólico.

- ¿De que hablaban? –inquirió.

- De nada, hijito –respondió Maggie muy feliz-.Los dejo, creo que el shopping aún está abierto. ¡Seré la envidia de mis amigas de alta sociedad!

Abrazó a su hijo cariñosamente y se alejó riendo mientras cantaba: “¡Me voy de compras! ¡Me voy de compras!”

Una vez Maggie se hubo ido, su esposo comenzó a sollozar.

- ¿Qué te pasa, papá? –preguntó William con preocupación.

- Nada, muchacho. Sólo que me da mucha pena el pobre hombre –lloraba-¡No merecía morir!

- Si, yo también lo lamento. Debe ser muy triste, sé lo que se siente desde que murió James a manos de la perra de Lara Croft.

Padre e hijo se abrazaron, mientras William intentaba eliminar a Vivian de su mente, pero ella no se apartaba de allí, y seguía gritándole que su padre era un asesino sin escrúpulos.

 

 

Como verán, no sólo me dejo llevar por la acción sino también por el drama y lo romántico.

 

Comentario: me encantaría ser Ramsinit (cuando estaba vivo) porque sería muy muy rico y todos querrían robarme ;) , sólo que yo no hubiera vendido mi alma.

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1 Jamas habia visto a una familia como los Rutland la esposa no denuncia al marido sabiendo que fue el asesino por 600 libras :P Desde luego es que hay que ver... y encima el marido tan campante viendo la tele como si el no lo hubiera hecho es que me dan ganas de cojerlo y :wub:

 

2 Willian es la mejor persona del mundo : Ayudo a las mujeres con la casa...como se nota que le gusta Vivian ;) pero sigue sin creer que el asesino es su padre despues de todo lo que hizo :fufu:

 

3 Gracias a Putai Lara sobrevivio ¡¡¡¡¡Bravo por Putai !!!!! jeje

 

4 Espero la proxima entrega esto esta buenisimo que abra pasado con Jean y con Alex ;) ya se vera...

 

Salu2

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En realidad, Maggie jamás tuvo intención de denunciar a su esposo. Ellos, como refleja el relato, se conocen desde que él tenía 25 años y ella 29, y él está acostumbrado a que ella lo chantajee. Maggie utilizó el recurso de fingir que va a denunciarlo para que le de dinero, pero no iba a hacerlo, y él lo sabía, en la historia se nota que él ya conoce sus trucos.

 

Y sí, William es buena persona, pero con Lara tendrá un trato muy diferente que con Vivian...

 

Con esto podría hacerse un debate (Ana María no podés faltar aquí): ¿Qué personaje femenino consideran que sufre más? ¿Lara, desde Egipto, arriesgando su vida a cada instante y viviendo toda clase de peligros (peligros que por cierto le atraen) o Vivian, desde Nueva York, que tras ser humillada por su jefe perdió a su padre y tendrá que trabajar más duro?

 

Recuerden: su opinión es importante, de ahí el debate.

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Yo creo que Vivian por que Lara se arriega en cada aventura que hace y esta acostumbrada a la accion y ademas Lara es una mujer de carecter fuerte y solitarios todo lo contrario de Vivian que esta ahora sin empleo y encima perdio a su padre y fue humillada y maltratada por sus jefes pero aun asi tiene pretendientes 8D aunque por otro lado Lara esta sin padres intentando buscar a su madre que creia muerta pero esta en Avalon por culpa de Amanda asi que las 2 estan sufridas pero creo que Vivian lo esta mas...

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Yo creo que estan parejas,ya que las dos perdieron a sus padres,bueno Vivian aun tiene a su madre,pero Vivian ha vivido muy poco tiempo con ello.Y Lara que ha perdido a su madre a temprana edad,y ahora que tiene sus 30 y tantos,yo creo que ha sufrido más,pero lo ha superado con el mundo de la arqueología

 

Aunque Vivian tambien pierde a su padre de forma drástica y cruel.La han tratado mal y todo.Pero para mi la que más han sufrido son las dos,pero un poco más Lara...

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