TOMB RAIDER Y LA CORONA DEL CÉSAR
Atardecía en Roma, y Lara Croft se encontraba como cada verano visitando el Coliseo, uno de sus monumentos favoritos.
Pronto sintió algo de hambre, y decidió volver al Hotel Pinewood. Pidió un plato de gnocchi de espinaca acompañado de patatas, y de postre un tiramisú.
Todo aparentaba ser un viaje turístico, sin embargo, este viaje tenía una finalidad diferente.
Ya caída la noche, Lara, regresó a su habitación donde encontró, debajo de su puerta, una carta que ella esperaba con cierta impaciencia. Se trataba de un mapa de la localización de una tumba inca donde se creía que descansaba el cuerpo momificado de Haluan, una diosa con poderes místicos. Mucha era la gente que conocía la leyenda de la joven Haluan,la tumba se hallaba perdida en el follaje de las selvas