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TOMB RAIDER EL broche de Nekaro


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Capitulo 1: La tumba de la naturaleza

 

Nekaro era un niño normal, que aquella tarde caminaba por el sinuoso camino de la costa. Acababa de observar el mar, el sonido de las olas todavia resonaban en su cabeza.

Llevaba mucho tiempo andando y sus debiles piernas estaban agotadas, pero tenia que volver a casa, antes de la caida de noche. Acaba de llegar a un cruce de caminos, ¿Por donde ir?No recordaba el camino, estaba ya muy lejos de la playa, y sin darse cuenta se habia adentrado en un oscuro bosque. Tras tomar el camino de la izquierda, la noche llego, y poco a poco se fue alejando mas del camino. ¿Donde estaba? El camino habia desaparecido, no habia rastro de vida. Observo a su alrededor, y contemplo como las flores se marchitaban, la tierra se secaba y los arboles morian. El miedo se apodero de el, pero siguio caminando como si uan extraña maldicion le persiguiera hasta la tumba...

Ya no escuchaba el mar, llevaba tanto tiempo andandoque no tenia fuerzas, estaba tan debil que cayo al suelo.

No pudo luchar, se limito a caer y a cerrar los ojos.

Desperto horas despues, no habia sido un sueño, el seguia hay, sintiendo la muerte a flor de piel.

Todo seguia igual, el cielo sin estrellas mostraba la tumba de la naturaleza, y si no se iba pronto esa tumba tambien le perteneceria a el.

Depronto algo acabo con aquella silenciosa calma, no era el llanto de Nekaro, pues sus oscuros ojos negros estaban secos. Fue un sonido, el canto de una mujer, era debil, pero hermoso, producia dolor y miedo, causaba temor al que ohia hablar de el, y muerte al que lo escuchaba. Nekaro se estremecio, era el canto de los muertos, el que devoraba el bosque dolorosamente, y el que se dolia como una estaca. Nekaro corrio, corrio lo mas rapido que pudo, alejandose d e esa cruel voz que cortaba el aire. Nunca saldre de este infierno penso, y cuando se dio cuenta de que el canto no se escuchaba se paro, y sus ojos quedaron cegados al observar una gran puerta rodeada por un muro de rosas negras.

Era increible observar como como aquellas rosas negras se unian a la parez creando un enorme muro de espinas. La puerta era enorme, estaba oxidada, y poseia grandes simbolos de lenguas desconocidas. Pero entre todas las lenguas, una era reconocible, pues era Latin, y su inquietante significado era este

 

El Cementerio de los no nacidos

 

Nekaro se extraño, y se alegro, por fin habia encontrado, un rastro de humanidad. Lastima que la mente de un niño pobre nunca haya conocido jamas la escritura, y sin saber de que se trataba se adentro en el cementerio.

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