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La Senda de las Profecias


Kaliya

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-Shirene- después de escuchar las ultimas palabras de Evan desde la cocina, escucho un golpe seco de la puerta de su casa, volvió a la salita, donde yacía el papel pintado sobre la mesa.

 

Agarro con fuerza el papel, miro los números entre sollozos y después lo rompió, corrió a la ventana y de nuevo algo le llamo la atención.

 

Abajo, apoyado en una farola, un hombre con gabardina y gorro, apuraba con prisa su ultimo cigarro, mientras tiraba la colilla alzo su cara hacia la ventana, donde pudo ver como Shirene se escondía.

 

-Mier.da- pensó Shirene, creo que me a visto, quien demonios será, me resulta sospechoso, seguro que quiere el libro.

 

-Shirene entro en la habitación y preparo el petate, camisetas limpias, braguitas de recambio, calcetines, sujetadores, pantalones deportivos prácticos y una chaqueta de abrigo por si hacia frió. Después fue al baño, cogió el cepillo de dientes y un tubo de pasta, un cepillo del pelo y algunas gomas. Volvió a la salita, y saco unas una navaja multiusos, unos guantes Fingerless, y una linterna con pilas.

 

Después de terminar su petate, bajo a la calle, antes de salir del portal, miro a ambos lados de la calle, el hombre de gabardina le había dado mucho miedo. Se dirigió a casa de Evan, no muy convencida después de lo sucedido, pero necesitaba de alguien que la llevase junto al grupo de expedición.....

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-Señorito Evan, señorito Evan- dijó una voz susurrando juntó a Evan- tienes visita.

-¿A estas horas? Dile que no estoy....- suspiró Evan entre sueños.

-Dice que es importante- explicó Karl, el mayordomo de la mansión.

-Vale, enseguida bajo...-contestó mientras ponía ún pie fuera de la cama.

 

Evan se pusó la bata de andar por casa y unas zapatillas, y bajó al recividor. Aún tenía la cara de sueño mientras bajaba por las enormes escaleras que comunicaban con el salón.

 

-¿Que haces tú aquí? ¿Pensaste lo que te dije?- preguntó Evan algo más recuperado del sueño.

- No no.... Sólo viné para preguntarte una cosilla...- dijo Shirene con la mirada hacía el suelo.

- A ver dispára- Bromeó Evan.

-¿Podría pasar la noche aquí? Esque en mi cas- dijó antes de que la interrumpiera Evan.

-No me des explicaciones, aquí tengo espacio de sobra. Karl, prepara la habitación para invitados inmediatamente- ordenó Evan.

-Si señor, ahora mismo- contestó Karl.

-Bueno, tendremos que llamar a los de la expedición para que en vez de tú piso quedemos en mi casa- explicó Evan.

-Pero ellos no saben donde vives....-musitó Shirene mientras iba sacando el pijama de la maleta.

- No hay problema, Karl irá a por ellos en el coche.- explicó Evan.- ¿Preparada para el viaje?

-Sí, me he llevado una navaja por si las moscas...Podría haber animales salvajes- dijó Shirene mientras sacaba unas diminutas tijeras de la navaja.

-Tránquila, llevaré una tienda para acampar.... Al menos podran pasar la noche dos personas en ella.- murmuró Evan mientras se acercaba lentamente al sitio de Shirene.

 

Casi casi ya estaban pegados, Shirene y Evan se cogieron de las manos, giraron la cabeza al mismo tiempo y cuando se dieron cuenta tenían sus caras a 2 centímetros de distancía. Se hizo un silencio en aquel salón, cuando Evan se estaba acercando ún poco más a Shirene algo les interrumpió:

 

-Señorita, ya tiene lista la habitación- dijó Karl desde las escaleras.

-Si..... si... Gracias- agradeció con voz temblorosa mientras se levantaba del sofá y se dirigiá al dormitorio.

 

Evan miró a Karl con una mirada de no muy buenos amigos, al rato Evan también se fué a dormir y a esperar que llegara la mañana siguiente.

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Marty no es muy asiduo a la lectura, pero aquella mañana había decidido pasarse por la gigantesca biblioteca de la Universidad de Oxford en busca de inspiración para sus cuadros. Sólo le quedaban tres meses para prensentar su proyecto de fin de carrera, y aún no había hecho ningún solo boceto... Todo atisbo de creatividad le había abandonado a principio de curso, cuando encontró a su novia y a su mejor amigo manteniendo relaciones sexuales en su propio estudio, sobre uno de sus lienzos.

 

Aquel "shock" anuló su creatividad y desde entonces no le surgían ideas para sus cuadros. Esa mañana pensó en acercarse a la biblioteca e intentar conseguir inspiración. Se fue directo a las estanterías más alejadas y polvorientas De lo olvidado salen las grandes ideas, pensó. La casualidad o quizá la suerte hizo que se fijase en un libro en concreto. Era un pesado monográfico sobre reliquias perdidas.

 

Lo sacó de la estantería, lo colocó sobre una mesa cercana, de un soplido le quitó el polvo y abrió una de las páginas al azar. Frente a él apareció el boceto, pintado en acuarela, de una piedra preciosa. Maravillado por su belleza se quedó observándola un rato mientras pasaba los dedos por el papel. A continuación leyó el breve texto que acompañaba al dibujo:

 

Según cuenta la leyenda, hace miles de años cinco dioses luchaban por dominar el mundo. Esta guerra sembró al planeta en el más profundo caos durante siglos hasta que un grupo de magos consiguió encerrar el espíritu de estos cinco dioses en una piedra preciosa, que yace escondida en algún lugar de La Tierra. Su paradero es desconocido pero, según cuentan, los magos dibujaron un mapa sobre un pergamino, lo rompieron en cinco partes y los esparcieron por lugares opuestos del mundo. El que sea capaz de encontrar los distintos fragmentos tendrá en su mano la llave para librar para siempre al mundo del caos... o para devolverlo definitivamente.

 

Bonita historia, pensó. Caos, dioses, magos, pergaminos... La leyenda le había comenzado a despertar la inspiración... Posiblemente sólo sea un mito, pero se de alguien que puede tener más información sobre esta piedra. Arrancó la página del libro y la metió en su carpeta, Alguien que pertenció a la familia y que fue desherada hace mucho, mucho tiempo...

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Max llegó a la casa de Karen Strogman, sin disimulo y muy enfurecido por el engaño del que fué victima se dispuso a forzar la puerta y entrar a la mansión de Karen......

Teniendo en cuenta que era muy tarde supuso que todos estarpia durmiendo, pero no le importaba el sólo buscaba a Antony, el autor del engaño.

Buscando y buscando por todas partes, lo encontró en una sala que parecía una mini-biblioteca al parecer se había quedado leyendo hata tarde.......

Cuando Antony lo vió quedó totalmente sorprendido y sin saber que decir preguntó:

-¿E... e......encontró lo que le pedí?

-Digame porque.....

-Porque que???

-Porque me envió a un lugar en el que no hay nada. Preguntó Max muy calmado aún..

-No lo comprendo.....

-¿De que quiere mantenerme alejado? ¿Qué es lo que busca y teme que yo encuentre primero?

Antony intentó llamar a seguridad, algo a a lo que Max respondió cortanto la linea del interno.

-Está bien- dijo Antony, ya rendido -Esto puede todo lo que tengo....pero que va....a veces Karen se pasa con su ambición y puede lastimar a gente que cree que es su amiga.........

-A quien se refiere exactamente- interrumpió Max

-A nadie en concreto- dijo Antony

algo que a Max no dejo muy covencido y en un leve vistazo al escritorio vió en la agenda que estaba señalada la letra "C", más precisamente la C de Croft.

-Lara Croft?- dijo Max- usted se refiere a Lara Croft......

-Emmm....... bueno......sí

-Digame exactamente para que quiere a Lara Croft?- Preguntó Max

-Quiere que la ayude a encontrar un pergamino y seguidamente un artefacto del cual leyó en un libro.....

-Y dígame como va a ser eso.

-No lo sé bien en concreto, se que ivan a organizar un viaje junto con otras personas que también se involucraron en el asunto- Dijo Antony, ya resignado de que no podía hacer otra cosa mas que soltar todo.

-Y cuando se van? Me veré obligado a acompañarlos- Dijo Max

-No estoy seguro se que es muy pronto, de seguro en cuanto contacten con la señorita Croft, la estuve llamando pero no está en su mansión......

-Bien, ya me enteraré.- Dijo Max muy confiado.

Acto seguido se retiró de la mansión...........

 

 

Max habia conocido a Lara Croft hace unos años, Lara Croft estaba en uno de sus tantos viajes y se encontró sumergida en un lío de balas, a causa de haberse robado un objeto de un Museo que pertenecía a una mafia muy poderosa.Casualmente Max debía encontrar otro artefacto que se encontraba en ese mismo museo, vaya casualidad, y se encontraron huyendo de disparos por el museo.Se dieron cuenta que ambos escapaban de lo mismo, "El enemigo de mi enemigo es mi amigo" y dió resultado, lograron escapar juntos, luego de huir por toda la ciudad y cuando la cosas se calmaron se presentaron, hablaron y desde ese día cada tanto se mantenían en contacto.........

 

 

 

[ Por favor no partan a su aventura sin mí]

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Ya eran casi las doce de la noche,justo en ese momento Lara llego a casa en su auto desde el hospital psiquiatrico,donde visito a Mauro.

Mientras que bajaba del coche por su cabeza pasaron algunos pensamientos acerca de los hechos recientemente sucedidos

 

Creo que esta fue la primera vez en la vida que Karen me dice "querida",seguramente ahora se porta bien conmigo por aquel libro,algo quiere,no hace falta conocerla a fondo para darse cuenta de que es una mujer ambiciosa,espero que tanta ambicion no le haga mal...ah..luego esta aquel chico pelirrojo,muy extraño,que entro gritando a su oficina,es obvio que Karen lo habia estafado,ella siempre hace esas cosas.

Aquella piedra preciosa que vi en ese libro,tendre que investigar mas,es como pasa con todos los artefactos,tienen su lado bueno y su lado malo

 

Lara ya habia entrado a su casa,las luces estaban apagadas

 

Seguramente Winston ya esta durmiendo,pero yo aun no tengo sueño,creo que aprovechare para investigar un poco y ver con que clase de cosas se quiere enfrentar Karen

 

Primero Lara subio a su cuarto,se cambio la ropa,luego bajo al salon principal,se acerco a una pared y presiono un boton oculto que abrio una puerta,que parecia una estanteria para libros.Se quedo alli hasta que escucho un extraño ruido,salio de la biblioteca oculta porque penso que era Winston pero en la sala principal en realidad se encontraba Max,que se infiltro en la casa

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-Hola Lara- dijo Max

-¿¿¿Max???- Pregunyo Lara muy confusa.

-Sí, soy yo, perdona la sorpresa, no nos vemos casi nunca, pero deví de avisarte.....

-Y no debiste entrar así, mellevé una termenda sorpresa al verte, podrías haberte anunciado en la recepción....

-Lo sé, pero me gustan los retos, quería saber que tal funciona tu sistema de seguridad.- Dijo Max con mucha confianza

-Yo no tengo nungún inconveniente, pero debiste haberme avisado, bueno en realidad no importa mucho, no cre que quieras entar a robar, así que eres bienvenido, de todas formas yo acabada de llegar y siempre estoy hasta, pero como dije, intenta avisarme ¿si?

-No te preocupes Lara lo haré la proxima vez, además no entré de esta forma sólo por chequear tu sistema de suguridad, quería saber si estaba todo en orden.......

-¿A que te refieres?-

-Es complicado, y por lo que veo aun no ha pasado nada.......

-Bueno sentemosnos y hablemos de ello- dijo Lara, -¿Pero de que se trata exactamente?-

-De un artefacto, que por lo que investigué en el camino, encierra a unos dioses que querían dominar el mundo

-Sí, ya sé de que se trata hablemos de ello................

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Marty salió de la biblioteca justo cuando cerraban. La oscuridad reinaba en Oxford y tan sólo unos pocos universitarios rezagados deambuleaban por el campus. El joven sacó su teléfono móvil y buscó en su agenda un número que hacía mucho tiempo que no marcaba.

- Tío Henshingly. Soy Marty...

- ¡Marty, cuanto tiempo! ¿Cómo le va a mi sobrino preferido? -respondió la voz grave y algo cascada de un hombre de casi 60 años, pero el timbre altivo propio de la aristocracia.

- Bien. Tío, te tengo que pedir un favor. Es muy importante.

- Tú dirás.

Marty dudó unos instantes antes de responder...

- Me gustaría saber cómo puedo contactar con...

De nuevo, dudó.

- ¿Con quién?

- Con Lara.

Lord Henshingly Croft tardó en responder unos segundos, pero a Marty le parecieron horas.

- Sabes que hace años que fue desheredada de la familia. Todos los quebraderos de cabeza que nos hizo pasar esa... bastarda.

Marty reaccionó sin pensar.

- ¡Cómo puedes decir eso de tu propia hija!

De nuevo, se hizo el silencio.

- Perdona. No era mi intención ofenderte. Siento haberte molestado...

Marty estaba apunto de colgar.

- Actualmente vive en una mansión que heredó de vuestra tía Victoria Croft. Está en el número 6 de Guilford Road, a las afueras de Surrey.

- Muchas gracias, tío.

Pero Lord Henshingly Croft colgó sin responder. Imagino lo duro que debe de ser para él hablar sobre su hija desheredada, y menos dar sus señas, pensó Marty, por mucho mal que haya podido hacer al nombre de la familia, nada debe de ser más doloroso que desprenderse de una hija

 

Marty se desplazó al aparcamiento de la universidad y arrancó su ferrari descapotable, regalo de sus papás por su vigésimosegundo cumpleaños. Surrey está a menos de una hora en coche desde Oxford, aunque con este buga llegaré en cuarenta minutos...

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"Mientras En La Mansión De Evan"

 

-Shirene- despertó entre finas sabanas de raso blanco y un mullido colchón de lomonaco, se desperezo y unos golpes en la puerta llamaron su atención.

 

-Señorita- señorita, esta usted despierta, soy Karl el mayordomo, le traigo el desayuno.

 

-Shirene- se tapo hasta el cuello, y -dijo- pase, pase, y la puerta e abrió, el mayordomo se acerco hasta la cama, desplegó la mesita y coloco encima el desayuno.

 

Por cortesía del señor Evan -dijo- Karl, gracias, -dijo- Shirene con ojos como platos. Enseguida el mayordomo se retiro. Era un manjar, enormes tostadas de mantequilla con miel de frambuesa, un gran baso de recién zumo de naranja exprimido, un plato con beicon y tortilla, y un gracioso jarroncito con una preciosa rosa roja.

 

El sueño de cualquier princesa, pensó Shirene, claro, pero ella no era ninguna princesa, era Shirene, la aburrida escritora de poemas que vivía en una casa normal, y que coleccionaba cuadros extraños entre polvorientos libros antiguos.

 

Pronto apareció Evan asomándose por la puerta sin llamar, y observo a Shirene, con sus largos cabellos sueltos cayéndole sobre sus tersos pechos, miro su dulce cara donde cualquier bruto encontraría la manera de crear las mas bellas poesías.

 

Cuando Shirene se dispuso a morder con gula la tostada de mantequilla y frambuesa, entro Evan, !Buenos Días! hizo su entrada triunfal, Shirene se quedo helada, agarro la sabana y se la subió hasta la cabeza, pronto la tostada empapo a filtrar la fina sabana, y con gruñidos y medio insultos a regaña dientes -dijo- Shirene, lar..go, fu..e..ra!!! in.beci..il.

 

Evan salió corriendo de la habitación mientras reía descontroladamente, Shirene bajo la sabana toda manchada, y muy enfadada corrió tapándose con la sabana en dirección al baño.

 

No entendía por que, tan pronto podía ser tan dulce, como tan amargo como la hiel.

 

Se metió bajo la ducha, cerro los ojos, y dejo correr el agua por todo su cuerpo, y pensó en aquel posible beso, que sentimientos tenia, se estaba riendo de ella, o realmente cabía una posibilidad de que Evan empezara a sentir algo profundo por ella.

 

De repente su calma se perturbo, Karl la llamaba desde la habitación, -señorita Shirene- Evan la espera con el equipaje abajo en el hols, por favor desee prisa, a mi señor no le gusta que le hagan esperar, pues se pone muy nervioso.

 

Shirene, salió del baño envuelta en la toalla, entro en la habitación, saco algo de ropa y se vistió, arreglo su petate, se aseguro de llevar aun la llave colgada de su cuello y rápidamente bajo, aun con sus largos cabellos sueltos y mojados.

 

Vio a Evan con una mueca en su cara que denotaba que la miraba conteniéndose la risa, ella frunció el ceño y paso de largo como un torbellino dando golpezazos en dirección a la puerta de salida, donde esperaba el coche tripulado por Karl que los llevaría a su casa a recoger al resto de viajantes.....

 

 

[Venga, que ya queda menos para emprender el viaje, animaros.]

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Shirene ya estaba en el coche mirando asombrada los inmensos jardines, fuentes y plantas que se encontraban junto al coche, frente a la puerta frontal. Evan dió ún golpe fuerte a la ventanilla haciendo que Shirene pegara un bote del asiento:

-Nosé que te dan, Evan, pero cada día eres más tonto- refunfuñó Shirene mientras bajaba la ventanilla.

-¿No me vas a dejar un sitio? No me gusta viajar sólo.- bromeo Evan mientras se metía al coche.

-No quiero ni una solo palabra de lo que pasó en la habitación, ¿entendido?- ordenó Shirene.

-Sí, sí, claro, una lástima porque estabas bién hermosa con toda la boca manchada de mantequilla- bromeó Evan.

 

Shirene empezó a pegarle puñetacitos en su hombro, luego dejaron el tema de la habitación y empezaron a hablar, Evan quería volver a coger la confianza de antes:

 

-Bueno, ¿cómo te va la vida?- preguntó Evan mientras sacaba el Champán y dos copitas de la mini-nevera del coche.

-No mejor que a tí- dijó Shirene mirando las dos copas.

-Bueno, ¿un brindis antes de zarpar no?- preguntó Evan mientras echaba el Champán en las copas.

-Vale, si insistes, además tengo una sed horrible.- explicó Shirene.

-Por el viaje, y por nosotros- musitó Evan- Chin Chin!- bromeó Evan.

-Chin chin...- dijó Shirene tratando cómo un tonto a Evan.

-A mí a veces el Champán me hace hacer cosas ''raras'' ¿sabes?- dijó Evan mientras miraba por la ventanilla.

-Pues más te vale que conmigo no hagas nada ''raro''- ordenó Shirene mientras quitaba la mano de Evan de su muslo.

 

Se hizó un silencio en el coche, mientras ambos se echaban miradas con deseos de expresar sus sentimientos, mientras tanto tendrían que esperar a que el coche llegara a su rumbo.

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*Casa de Lydia*

 

Haber...tengo que preparar todo, empìezo.

Lo primero de todo es...como no, !el "maquillaje"!: pintalabios, rimel, lapiz de ojos, sombra de ojos, colorete, maquillaje.

Después...como no, ropa, el tiempo que esté allí tendre que canviar de vestimenta cada día,

el movil aunque no se como lo voy a cargar pero bueno..., un revolver de 20 balas... aunque nunca lo he utilizado...da igual!

crema protectora, spray antivioladores, mi mp3, mi navaja multiusos, linterna,paquete de clinex, y cosas personales.

 

Ya estoy lista... aunque creo que se me olvida algo... no se que es.

AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA! pero ¿quien me va a llevar! me cago en D___ y en la p___ v___

si llamo a mi ex...sería peor que asno de shrek, y si me acoplo al grupito que hay...me tomarán como una inútil que no tiene a nadie, !que asco de vida tengo!

Pero de repente, suena su movil ¿Será estó una respuesta? aceptó la llamada y dijo ¿Si?

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Marty amaneció recostado en su Ferrari descapotable, aparcado en la cuneta de la carretera dirección a Surrey. El cansancio de todo un día de investigaciones en la Biblioteca hizo a Marty parar el coche a medio camino y echarse una cabezada... aunque cuando vio que amanecía, se dio cuenta de que había dormido toda la noche.

 

Aún somnoliento, salió del coche, orinó cerca de un árbol y se tomó un par de galletas que llevaba en los vaqueros como desayuno. A lo lejos, en el horizonte pudo ver Surrey. No le llevaría más de diez minutos llegar hasta allí.

 

Lara, tu primo Marty Croft te necesita... Necesito encontrar esa piedra preciosa. Creo que si llego a tocarla con mis propias manos, la inspiración volvera a mí intacta...

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Mientras tanto en la mansión Croft, Max y Lara preparaban las cosas para el viaje.....

Cabe destacar que no todos estaban enterados de que Lara participaría y tampoco conocían la existencia de Max.

Lara y Max tampoco tenían una de las llaves de la bóbeda del libro, pero eso no les importaba.Les bastaba con el premio mayor.........

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Llego la limusina de Evan a casa de Shirene, donde esperaban los demás acompañantes (Karen, Lady, Brian) abajo en el portal. Karl bajo del coche y abrió una de las puertas traseras, donde al segundo asomo Evan.

 

Buenos días, -dijo- Evan, todos se giraron con cara agria al descubrir su llegada, acto seguido bajo Shirene, lo que causo un gran revuelo mientras miraban sorprendidos y refunfuñaban.

 

Ha cada uno le rondaba su mala idea en la cabeza al ver aparecer a Shirene con Evan.........

 

 

 

 

[Digo YO, si Brian es un personajes ficticio y sin dueño, alguien le interesaría matarlo y quitarle la llave, alguien que no la tenga?, o consideráis que es mejor que viva para utilizarlo como juego a la hora de interactuar?. El/la dueño/a del personaje que creo a Brian decide.]

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-¿Estaís preparados?- preguntó Evan.

 

Todos asintieron con la cabeza, cogiendo las maletas con las manos.

 

-Pues venga, todos al coche-ordenó Evan.- Karl, al aeropuerto, ¿tienes la avioneta que te pedí lista?

-Si señor, está junto al andén 345- explicó Karl.

-Muchas gracias Karl, bueno ¿Que tal todo?- preguntó Evan sarcásticamente.

 

No sabía si por los nervios o por simple envidia nadie contestaba, sólo miraban por las ventanillas conteplando el paisaje. Unos minutos después llegaron al aeropuerto.

 

-He aquí mi avioneta, no es gran cosa pero aguantará el peso de todos.- dijó Evan abriendo la puerta de la avioneta- ¿Alguien sabe pilotarlo?- preguntó Evan.

 

Todos los miraban con cara de pocos amigos, acto seguido contestó.

 

-Bueno da lo mismo, lo intentaré pilotar yo, no debe ser tan dificil- musitó Evan.

-Veremos a ver si logramos salir del aeropuerto con este trasto- refunfuñó Karen.

-Tú alomejor no, porque con otro comentario de ese tipo te puedes quedar en tierra- dijó Evan mientras pellizcaba la barbilla suavemente de Karen.

-¿Subimos ya?- Preguntó Brian.

-Sí, sí, adelante- contestó Evan- ¡TODOS A BORDO!

 

Todos subieron al avión con el destino indicado, parecía que Evan sabía pilotar la avioneta, las vistas eran increíbles, pero parecía que nadie las comentaba, en el trayecto que llevaban de viaje ninguno había abierto la boca, excepto Evan, que sólo la abría para comerse una bolsa de patatas que había comprado en la cantína del aeropuerto.

 

[El peronaje lo creé yo, pero le dió nombre Kaliya, por mi parte que muera ;), jajaja.] [Por cierto, ¿donde se dirige la avioneta?]

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